Centroamérica Cuenta, el principal encuentro literario del istmo, busca una nueva sede en la región para celebrar su próxima edición en 2019, ante la crisis que estremece a Nicaragua y que obligó a suspender la edición de este año, dijo la directora del festival.

Claudia Neira, directora del encuentro literario impulsado por el novelista nicaragüense Sergio Ramírez, dijo a AFP que hay dos países centroamericanos que están siendo considerados como sede del festival de cinco días, que atrae a escritores de renombre de todo el mundo de habla hispana y otras regiones.

"Estamos explorando dos posibilidades, queremos un país que tenga un público que pueda ser muy receptivo a este tipo de programación, creemos que el próximo mes se pueda anunciar" la sede, dijo Neira, también nicaragüense.

La directora de Centroamérica Cuenta visitó San José para participar en la Feria Internacional del Libro de Costa Rica, donde presentó ponencias sobre gestión cultural y sobre la obra de Sergio Ramírez, uno de los escritores más reconocidos de la región.

Sin detallar cuáles países son considerados como posibles sedes de la próxima edición del festival, Neira recordó que Costa Rica y Guatemala ya tienen ferias literarias, por lo que cuentan con un público interesado en el tema.

Centroamérica Cuenta ofrece conversatorios con autores, talleres de formación, segmentos dedicados a la literatura infantil, un ciclo de cine basado en literatura y visitas a colegios y universidades.

También hay lanzamientos de libros y las editoriales ofrecen sus publicaciones para la venta.

- Tiempos de crisis -
Desde su primera edición en mayo de 2013, Centroamérica Cuenta se ha celebrado cada año en la capital nicaragüense con un público creciente y con más presencia de escritores internacionales.

Todo cambió con la crisis que estalló en abril pasado, con una ola de protestas contra el gobierno del presidente Daniel Ortega y la represión contra los manifestantes, que ha dejado más de 300 muertos y miles de exiliados y detenidos.

"Las condiciones sociopolíticas de Nicaragua no nos permiten en este momento pensar en llevar un evento como este. Hay una crisis muy grande, no hay seguridad", advirtió la directora del festival.

"Para volver a Nicaragua tendría que tener condiciones mínimas de seguridad, no solamente física sino seguridad política, que se respeten los derechos básicos de los seres humanos, lo cual está en entredicho y ha llevado a la ola de violencia y represión que tenemos ahora", agregó Neira.

Señaló que en un contexto como el que vive Nicaragua, en el que "250.000 personas se han quedado sin empleo y hay un éxodo grande de personas", resulta imposible celebrar el festival.

Sin embargo, consideró que las condiciones del istmo hacen más necesario que nunca organizar el espacio literario para discutir temas de libertad y creación.

"Lo que queremos con Centroamérica Cuenta es fortalecer la marca de Centroamérica como un espacio de creación literaria, que no sea solo conocida por desgracias o por eventos como los que están pasando en Nicaragua, sino por rasgos propios de su identidad, como la creación cultural", comentó.

El festival en sus primeras ediciones tuvo un foco muy regional, dedicado a los autores centroamericanos, pero posteriormente lo amplió a todo el mundo de habla hispana, incluyendo a la diáspora latinoamericana en Estados Unidos, y posteriormente a autores de otros países europeos, como Italia, Francia y Holanda.

Aún así, la creación centroamericana guarda un lugar central en el festival, según su directora.

"Centroamérica es una región muy fértil, tenemos literatura de la diáspora, literatura de la guerra, de la diversidad sexual, todos esos son temas importantes y tienen que conservarse", sostuvo Neira.